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Geofísica, Geografía física, núcleo, rotación, Sismología, Tierra

Los autores del nuevo estudio, que se publica en Nature Geoscience, son los investigadores Yi Yang y Xiaodong Song, del Instituto de Geofísica Teórica y Aplicada de la Universidad de Pekín, en China.
Al analizar las ondas sísmicas repetidas desde principios de la década de 1990, los autores del estudio comprobaron que todas las trayectorias que anteriormente mostraban cambios temporales significativos han mostrado pocos cambios durante la última década. Este patrón globalmente consistente sugiere que la rotación del núcleo interno se ha detenido recientemente.

Esta rotación se ha inferido a partir de cambios temporales entre ondas sísmicas repetidas que deberían atravesar el mismo camino a través del núcleo interno.
Han comparado este patrón reciente con los registros sísmicos de Alaska que se remontan a 1964 y parece estar asociado con un retroceso gradual del núcleo interno como parte de una oscilación de aproximadamente siete décadas, con otro punto de inflexión. a principios de la década de 1990. De acuerdo a sus cálculos, estos cambios en la rotación del núcleo interno también altera el campo gravitatorio interno y causa deformaciones en la superficie, lo que a su vez puede influir en el nivel del mar y alterar la temperatura global del planeta.
De acuerdo con Yi Yang y Xiaodong Song, los datos aportan pruebas de la existencia de interacciones dinámicas y cambiantes entre las diversas capas de la Tierra, desde al núcleo hasta la corteza, que estarían relacionadas con el acoplamiento gravitatorio y al cambio de momento angular del planeta.
El fenómeno tendría efectos en toda la Tierra. Los días se están acortando (hoy duran una milésima de segundo menos que hace 50 años) y esto podría deberse, al menos en parte, a la variación en el movimiento del núcleo. Los cambios del núcleo generan transformaciones en la corteza, se traduce en cambios en el fondo marino y en el nivel del mar.

La Tierra es un cuerpo casi esférico de unos 6370 km de diámetro ecuatorial.
El interior de la Tierra tiene cuatro capas principales: En el exterior está la corteza, compuesta por suelo y rocas conocidas. Bajo ella está el manto, de roca sólida con una capa fundida encima. El interior o núcleo de la Tierra posee dos partes: una capa externa de fluidos y un núcleo interno sólido.
La corteza exterior de la Tierra se llama litosfera e incluye la corteza y parte del manto superior. La corteza flota en la astenosfera, como un iceberg en el mar. El núcleo exterior está formado básicamente por oxígeno, hierro líquido y níquel. Su núcleo interior, a unos 4.000 ºC, es de hierro sólido y níquel.
El núcleo es la capa más profunda de la Tierra zona esférica de aproximadamente 3475 kilómetros, y se compone por dos partes: una externa fluida, donde las temperaturas se sitúan entre los 4.000 y 5.000 grados centígrados, y otra interna sólida, que llega al centro de la esfera y alcanza una temperatura similar o mayor que la del Sol, de hasta 7.000 ºC.
Los cambios bruscos en el comportamiento de las ondas sísmicas al alcanzar esta zona, se ha sacado la conclusión de que el núcleo externo tiene las propiedades de un líquido en franco contraste con la masa sólida que lo rodea. Estudios sugieren que la zona más interna del núcleo, con un radio de 1255 km, puede ser sólida o cristalina.
Bibliografía:
Yang, Yi; Song, Xiaodong;«Variation of the Earth’s inner-core rotation», Nature geoscience,25 January 2023
https://www.researchgate.net/publication/367351565_Multidecadal_variation_of_the_Earth’s_inner-core_rotation
Instituto Geográfico Nacional – «Sismología«
https://www.ign.es/web/sis-teoria-general
Dinámica de la Geosfera
https://www.um.es/sabio/docs-cmsweb/materias-may25-45/tema_4.pdf
Strahler, Arthur N.; «Geografía Física», Editorial Omega, 1984
Sydney P. Clark, JR. «La estructura de la Tierra», Ed. Omega, 1975